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RESEÑA DE "BABUJAL" DE DARIO VILAS

 

 

 

 

 

 

 

 

 

RESEÑA

En esta novela Darío Vilas nos narra tres historias diferentes que se entrecruzan y se unen al final. Ana, la protagonista, es el hilo conductor y el que las une para cerrar la novela. Las tres narraciones, al hacerlas independientes y cerradas por capítulos, no se mezclan ni se hacen ininteligibles. Es una forma sencilla pero efectiva de lograr contar, a la vez, y en diferentes momentos en el tiempo, tres relatos completamente distintos pero con un nexo en común que se desvela al final de la trama, sin enmarañar la novela y sin que el lector se pierda en ningún momento.

Una de ellas narra un acontecimiento importante en el discurrir de la Guerra Civil Española. En Belchite hubo una batalla cruel y sangrienta donde los dos bandos, el nacional y el republicano, se destrozaron para dejar después abandonado y muerto un pueblo en ruinas. Vilas basa este relato en los duros momentos en los que sus dos protagonistas pasan mientras huyen del lugar, buscando encontrarse con sus compañeros y salvar la vida. La ambientación de los personajes está muy lograda pero he echado de menos más descripciones del lugar. Quizás porque soy de la tierra y me siento más cercana al paisaje. Pero me he quedado como triste, pues Darío, pudiendo recrearse en el horror de las imágenes de edificios destruidos por las bombas y el terror a morir entre un fuego cruzado, se limita a pasear a sus personajes por el escenario de una manera muy rápida. Cualquier pueblo de España podría haber sido el lugar donde ellos estuvieron. Creo que ha perdido la oportunidad de utilizar un lugar emblemático y rodeado de leyendas fantasmales, como es Belchite, para darle a su novela un toque más añadido de calidad y de terror.

Los personajes ya se perfilan  como importantes en el desarrollo de toda la trama. Darío cuenta sus historias personales y pasadas en pequeñas dosis hasta desvelar sus secretos al final de la historia.

La otra historia que transcurre paralela y que se remonta a los años de la infancia de Ana, también está muy bien estructurada. Desde el punto de vista de la protagonista se va descubriendo un mundo nuevo; el mundo real del mundo rural de aquellos años de la postguerra donde los vencedores tuvieron la suerte de vivir con lujos y los perdedores tuvieron que terminar escondiéndose en los bosques o, simplemente, despareciendo en el anonimato de la vida.

La novela se cierra regresando al mundo actual y real de la protagonista. Ella es la que enlaza las otras dos historias y las une, cerrando el círculo y desvelando todos y cada uno de los secretos que guarda con sabiduría y delicadeza la novela.

 

LO MEJOR

La prosa de Darío te mece y te adentra en su mundo. El escritor tiene una interesante forma de ver las cosas y las narra con ese estilo tan suyo que lo caracteriza y lo diferencia de otros autores.

En una entrevista a "La vanguardia", dice que la novela está pasando por un gran bache. El mundo se ha vuelto muy visual y se corre el riesgo de perder la esencia de la riqueza literaria. Pero yo pienso que con novelas como la suya, ese bache se va a rebasar con soltura y sin mucha dificultad; porque el mundo literario necesita escritores que innoven en los géneros y que nos lleven por caminos diferentes en las lecturas de sus obras. Con Darío Vilas ese camino ya ha empezado a crearse. Sus luces y sombras iluminan las rocas que pueda encontrar en el camino el difícil mundo de la novela y del relato corto.

También destacar en la novela los pequeños momentos en donde asoma el terror. Son pequeñas pinceladas que le dan un toque de misterio a la historia. Darío Vilas consigue enriquecer más la historia con esos matices que lanza como si fueran gotas de pintura en un cuadro de  Monet.

LO PEOR

Las descripciones paisajísticas. El no querer hacer una novela visual parece que le ha hecho omitir muchos detalles descriptivos de los lugares donde transcurren los tres momentos más importantes de la novela.

Sobre todo en el antes mencionado Belchite. Un lugar mágico para muchos, un lugar de dolor y de recuerdos cruentos para otros. Podría haber sacado un jugo allí que se desvanece con la misma rapidez con la que los personajes corren por sus calles.

Para terminar decir que es una novela muy recomendable y que merece la pena leer para degustar la magia de la prosa de Darío Vilas.

VALORACIÓN FINAL

PROSA: 8

AMBIENTACIÓN/ATMÓSFERA: 5

PERSONAJES: 8

DESENLACE: 9

ENTRETENIMIENTO: 8

ORIGINALIDAD: 7

NOTA MEDIA FINAL: 7,50

 

EDITORIAL:  http://www.editorialstellamaris.com/

 

RESEÑA: Ana Vivancos Jiménez

MAQUETACIÓN: Carlos Navas Martínez-Márquez

SINOPSIS

Ana, felizmente instalada en París, recibe en un mismo día dos llamadas telefónicas que alteran su existencia cotidiana y la obligan a regresar a España: por un lado, su yerno le comunica que va a ser abuela y, por otro, la informan de la muerte de Alfonso, su padre, un héroe de guerra condecorado, al que siempre se había sentido muy unida. Pero regresar al caserón familiar en el que ella y sus hermanas fueron criadas por una sirvienta cubana de su padre, Hada, tiene su precio: forzar a Ana a recordar su vida anterior.

Aunque muchas cosas han cambiado en esos años, muchas otras, visibles e invisibles, permanecen ligadas a la antigua vida en el caserón. Por la infancia y adolescencia de Ana deambulan los ecos de sangrientos episodios de la guerra civil, un crimen cometido hace más de dos décadas todavía por resolver, y una palabra inquietante y amenazadora que no puede pronunciarse: Babujal. Ana tendrá que reconstruir el pasado y encarar una existencia hasta ahora en construcción permanente, cuyos cimientos ha visto resquebrajarse una y otra vez. Y tendrá que decidir entonces entre enterrarlo definitivamente o enfrentarse a él con todas las consecuencias.

Babujal supone un jalón en la carrera literaria de Darío Vilas, una de las voces más prometedoras de nuestro actual panorama novelístico. El autor desafía las convenciones de los géneros aunando un fresco costumbrista de la vida rural de España de los años cincuenta, una novela de intriga psicológica y el despliegue de recursos narrativos propios de relatos de terror.

La historia de Ana nos interroga sobre la capacidad de las personas para seguir viviendo cuando saben que sus convicciones más arraigadas están en entredicho. Darío Vilas consigue identificar ese lugar en que las medias verdades son más feroces que cualquier demonio agazapado. Con su singular maestría narrativa, nos deja al terminar la novela en una severa y sigilosa vigilia, apenas sin aliento.

Por Ana Vivancos Jiménez

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